TOMA DE REHENES EN EL BARRIO SAN CARLOS.

Alrededor de las nueve y media de la mañana de este jueves efectivos policiales de la Comisaría Tercera, del Menor y la Familia, se dirigen a una vivienda del barrio San Carlos porque se suponía que había sucedido una pelea de pareja. Cuando llega la Policía uno de los de la pareja en conflicto se encierra dentro de la casa con dos hijos de siete y ocho años, respectivamente. Ahí es cuando el subjefe departamental de la Policía de Entre Ríos en Federación, comisario Luis Pereyra, llega con otros efectivos al lugar y comienzan a dialogar con quien tomó de rehenes a sus hijos. El hombre aseguraba tener armas de fuego y estar dispuesto a usarlas, pero eso no resultó real. Se trató de hacerlo desistir de su actitud. Se intentó que la esposa, la fiscal en turno, la madre y la propia Policía trataran de hacerle deponer la actitud pero nada se logró hasta que llegó el abogado que lo defendiera en causas anteriores y lograra por fin pasar. La preocupación estuvo dada desde un principio ya que no solamente el hombre mantenía abrazada a su hijita y blandía un machete con una mano sino que al llegar el patrullero policial este hombre lo recibió con una bomba molotov que afortunadamente no impactó en el rodado. En este momento es que la fiscal da la orden de ingreso y así los efectivos policiales logran ingresar a la vivienda y reducir al trastornado padre.

Privación ilegítima de la libertad, amenaza calificada y resistencia a la autoridad fueron los cargos contra el hombre, que fue atendido por un psicoterapeuta y trasladado a Sala 8 de Concordia. Los niños no sufrieron ningún tipo de lesiones ni daños. En dialogo telefónico con Radio Uno, el subjefe de la Departamental de Policía aclaró que «en todo momento primó el diálogo y la preservación de la buena condición física de los menores».

IMAGEN: Radio City.-