FEDERACIÓN MARCHÓ PIDIENDO JUSTICIA POR MARY CENTURIÓN.

A María Leonor Centurión, conocida como Mary por la gente, la asesinó su pareja Edgardo Manuel Lacaze, empresario fúnebre de 72 años, el pasado jueves 6 de diciembre alrededor de las tres de la tarde. Mary recibió once puñaladas, de acuerdo con la información vertida desde la morgue de Concordia. Al viralizarse la noticia las redes sociales hicieron correr como reguero de pólvora la marcha autoconvocada por mujeres de diferentes ámbitos, algo que sucedió este viernes 7 de diciembre después de las siete de la tarde en plaza Libertad de Federación. El disparador fue la posibilidad de una prisión domiciliaria para Lacaze. La fiscal Josefina Penón Busaniche dispuso la prisión preventiva mientras se reúnen las pruebas para condenar al femicida.

La marcha, encabezada por su hermano Juan y familiares de la asesinada, comenzó con la llegada de mujeres jóvenes a la plaza Libertad, ubicada en pleno centro de la ciudad termal. Cada una dijo lo que sentía, lo que debía decir. Una de las mujeres autoconvocadas leyó lo siguiente «¿Hacía falta que pasara ésto ante nuestros ojos para que tomáramos conciencia? A Mary la mataron y fue un femicidio; a Lucía la mataron y fue un femicidio; a Sheila la mataron y también fue femicidio;a Marina la mataron y fue femicidio, y el femicidio atenta aún con las que quedamos vivas; nos mata la alegría, la seguridad, las ganas de salir, de comer, de dormir; nos mata la esperanza. El femicidio atenta contra el cuerpo de la mujer que es asesinada, su integridad, su autonomía pero también atenta contra la mente de todas las compañeras que sentimos el golpe y el dolor como si fueran propios; Mary tenía sesenta y pico de años, tenía hijos, todo el mundo la quería; tenía reconocimientos culturales; no se drogaba; no salía de joda; no andaba de pollerita corta; no caminaba sola por la calle de noche e igual la mataron. No, no fue un crimen pasional. No, él no hizo nada para que él reaccionara así. Hace cinco días prendí la tele y fue en Chajarí, hace dos días paramos por una injusticia; ayer prendí la tele y fue en Federación, ¿y si mañana ya no prendo la tele? El femicidio es un monstruo silencioso que a veces saca sus garras y te hace saber que se acerca».

La marcha recorrió desde plaza Libertad, en la intersección de las avenidas principales, siguió por uno de los carriles de la avenida San Martín, dobló por Las Azaleas, pasando frente a la Jefatura de Policía donde el jefe policial Adalberto Roldán salió a escuchar como le cantaban «Se sabía, se sabía, a los femicidas los cuida la policía». La marcha dobló por Francisco Ramírez y pasó frente a la Municipalidad. Siguió por el costado de la escuela «Carlos Pellegrini» y la iglesia y terminó frente a la cochería fúnebre propiedad del femicida Manuel «Carancho blanco» Lacaze.