NÉSTOR BERTERAME: «LE HICIMOS SABER AL MINISTRO URRIBARRI QUE QUEREMOS PARTICIPAR DE LAS DECISIONES DEL GOBIERNO PROVINCIAL».

En la visita que Mauro Urribarri, el ministro de Gobierno de la gestión de Gustavo Bordet, hizo en la tarde de este viernes 28 de julio a Federación y su unidad básica, pesó la interna. No podría ser de otra manera si se tiene en cuenta que el peronismo federaense es básicamente internista y juzga como «traidores» a aquellos que «sacan los pies del plato». Ahora el peronismo tiene varios frentes de batalla en juego: el equilibrado jefe departamental Adolfo «Bocha» Rigoni, los concejales minoritarios de toda minoría y los dirigentes que han ocupado cargos y ahora deben batallar desde «el llano». No parece que Néstor Berterame, ubicado en este último grupo (el hombre fue el delegado de la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande y ahora busca que respeten eso) sea un personaje fácilmente manejable. No lo es y así se mostró en una reunión previa que hubo con el ministro Mauro Urribarri. Es que ya había pasado Berterame por la instancia de hacerle saber a Urribarri padre que debía alinearse con él en Federación. En aquella oportunidad, donde fueron a pedirle lo mismo Alejandra Minino, Carlos Miller, Carlos «Quito» Gómez y «Jastuto», el gobernador se reunió en Buenos Aires con Cristina y los dejó plantados. Esto parece ser el antecedente tomado por el peronismo entrerriano que viene ocupando el Gobierno provincial desde hace muchísimo tiempo. Gustavo Bordet, dicen los peronistas de Federación, los dejó colgados. El entender que alguien que vino a Federación a buscar el apoyo y lo logró cuando los candidatos a gobernador eran otros; el entender ahora que no atender las demandas de los «compañeros» pero sí atender al enviado macrista Rogelio Frigerio,; bueno, eso no está bien visto por los peronistas federaenses. Y Berterame se lo hizo saber a Mauto Urribarri. No quedó claro qué grado de contemplación tuvieron los demás dirigentes (Bravo, Miller, Rigoni) al encontrarse con quien cumplió la doble función de enviado partidario y funcionario gubernamental.

Néstor Ramón Berterame ha vuelto al llano obligadamente. Pero el viejo peronista no da el brazo a torcer. Aseguró ante FEDERACIÓN AL DÍA que no fueron suaves al plantearle al segundo de Bordet, y de su padre en cuanto al manejo urribarrista del peronismo, que Federación quedó ajena de toda decisión tomada en la Casa Gris. También, porque mencionábamos el internismo líneas arriba, Berterame no iba a quedar como un pendejo frente a «Bocha» Rigoni, Ricardo Bravo y Carlos «Bochín» Miller, que fueron quienes se juntaron con Urribarri hijo antes de reunirse con la militancia este viernes en la Unidad Básica de calle Las Azaleas. «Jastuto» tomó la posta y le hizo saber a Mauro que pasaba de todo en Federación, y todo negativo. Berterame mismo reconoció que «hay que llegar juntos a las PASO del 13 de agosto para llegar bien a octubre y de ahí ganar en el 2019».

El viejo ex delegado de CTM parece ser de esos personajes que se fortalecen en las malas. Abandonado por los votantes, lejos de CTM (donde estuvo 13 años), ninguneado por sus compañeros que ahora prefieren negociar con los funcionarios nacionales antes que con la propia tropa y con personajes mediáticos que le dan la espalda después de haber comido de su mano, Néstor Ramón Berterame definió su lugar junto a los candidatos de Bordet, Mayda Cresto, Juan José Bahillo y Carolina Gaillard.

Néstor Berterame está solo pero no deja de tejer estrategias que combinan lo económico con lo político. Por eso sigue impulsando hacia lugares de poder a diferentes personas. Como la dirección del hospital a cargo de Ernesto Luis Álvarez, sobre el que -por lo menos- hay dudas si tuvo que ver o no con esa designación. Como la treintena de federaenses que trabajan en la CTM gracias a él. Como la designación en CTM de la actual pareja de quien ahora lo combate desde un sitio digital «de la región de Salto Grande» luego de haber sido sostenido por el peronismo federaense y Néstor «Jastuto» Berterame.