En la madrugada del 2 de abril de 1982, las Fuerzas Armadas argentinas desembarcaron en las inmediaciones de Puerto Argentino y dieron comienzo a la guerra en las Islas Malvinas. Cuatro décadas después, El Burro Studio, un grupo de desarrolladores argentinos, recreó las experiencias de los soldados en Malvinas, la última carta, el primer videojuego desarrollado íntegramente en Argentina basado en el conflicto del Atlántico Sur.
Aún sin fecha de lanzamiento confirmada, cuenta la historia de un soldado de 18 años, que es el único sobreviviente de su batallón y debe proteger, hasta el final de la guerra, las últimas palabras escritas por sus compañeros caídos en combate. Este juego de acción y aventura en tercera persona “expone las crudas penurias que los soldados tuvieron que soportar para sobrevivir al frío, al hambre y a la agresión, no solo británica, sino también de los superiores argentinos”, según su descripción en la plataforma Steam.
Bastó con el lanzamiento del tráiler para que Malvinas, la última carta se convirtiera en un fenómeno viral en las redes sociales. Apenas se conoció, no faltaron usuarios que criticaron la propuesta argumentando que la guerra no es un juego y que así se banaliza el sufrimiento de los soldados y sus familias.
“Al principio a nosotros también nos incomodaba combinar los videojuegos con la guerra de Malvinas” cuenta Hernán Patané, líder del proyecto. “Buscamos que la gente se pregunte qué reconocimiento tienen los excombatientes”, explica. El desarrollo del proyecto llevó una larga investigación previa, que incluyó 12 horas de entrevistas a excombatientes. “Fueron ellos quienes nos dijeron que querían que el conflicto de Malvinas se siga discutiendo”, dice Patané.
“Este videojuego servirá siempre y cuando eduque a los chicos sobre la Guerra”, sostiene Silvio Katz, veterano de guerra. “Espero que ayude a que los más chicos puedan conocer lo ocurrido en Malvinas», agrega.
Al igual que Katz, José Luis Gómez también es excombatiente y tiene una mirada optimista sobre el costado pedagógico de este videojuego: “Será positivo para la sociedad si permite reflexionar sobre el daño que causa una guerra”.