LA RENDICIÓN, O CESE DE HOSTILIDADES, SEGÚN EL EX COMBATIENTE JORGE BOUCHET.

El ex combatiente de la guerra de Malvinas y hoy presidente de la junta de gobierno de Colonia Alemana, Jorge Bouchet, recordó el cese de hostilidades decretado el 14 de junio de 1982 por los altos mandos militares. A través del teléfono, mediante una entrevista realizada el pasado lunes 12 por la 106.1 Radio Uno, Bouchet recordó los avatares que le tocaron vivir en la contienda.

¿Vivió siempre en Colonia Alemana?

-Nací en lo que hoy es el barrio privado Paso de la Barca, en esa casona que está allí pero me crie acá, en Colonia Alemana, porque mi familia materna era de acá. Esa fue mi vida. Lo que pasa es que yo, a los quince años, comienzo mi carrera militar y me desplacé al sur argentino; estuve casi siempre de Mar del Plata para abajo. Y hace doce años que estoy nuevamente, acá en la zona.

¿La guerra de Malvinas lo sorprende en carrera militar, en Mar del Plata?

-No. yo, ese 2 de abril, estaba convaleciente de una operación bastante importante que me habían hecho dos días antes. Y escucho por la radio que tropas argentinas habían tomado las islas Malvinas esa madrugada. En realidad para todos fue una sorpresa; la gente que desembarca en Malvinas se entera a bordo del buque, llegando a Malvinas, que se iba a hacer el Operativo Rosario. El resto nos enteramos ese mismo 2 de abril ¿No? Yo tenía la directiva de quedarme en el continente por un tema, bueno, se entiende la asepsia de un lugar de combate, donde uno tiene que estar en el campo, en una trinchera; no era lugar para una persona convaleciente de una operación. Por lo tanto yo viajo a Malvinas aproximadamente el 10 de abril. Viajé como polizón, como quien dice colado en un avión viajé a Malvinas. Estaban mis compañeros, mis soldados con los que nos diferenciaba muy poco la edad, teníamos casi la misma edad. Había una mistad con muchos de ellos, una hermandad. No concebía yo quedarme en el continente y mucho menos aprovecharme de mi circunstancia así que sentí la necesidad de ir a las islas.

Cada vez que se habla de Malvinas se habla de los estaqueos en el hielo, del pie de trinchera a causa de estar con el agua hasta las rodillas en un pozo, el hambre ¿Cuál es su reflexión sobre eso?

-Eeh, bueno; acá, por ejemplo, tanto los combatientes de Federación y del departamento Federación son colimbas, conscriptos. A ver; el tema, muchas veces, no hay que verlo ni en blanco ni en negro si no con todos sus grises. Convengamos que la alimentación no era la mejor; no estábamos en nuestra casa; no podíamos elegir. No había la cantidad ni la calidad que, por ahí, era necesaria. Pero, entiéndase, en un lugar como Malvinas que era territorialmente amplio, con escasos caminos en ese entonces y con un terreno de turba muy difícil, la distribución del alimento que debería haber sido dos veces al día, no era tan fácil. No era fácil acceder a la comida caliente ¿No? Después estaban las macanas que nos mandábamos nosotros. Yo y mi grupo de soldados un día, bueno, no nos gustó la comida. Por distintas circunstancias les digo vamos a comer las reservas que eran latas de carne envasada, que llamaban corned beef. Comimos lo que teníamos de reserva pero después, más adelante, cuando el bombardeo no permitió que se acercara la comida hacia nosotros, pasamos hambre. Pero la culpa fue nuestra. En cuanto a los estaqueos, yo no he visto ninguno. Y eso que mi posición era muy móvil; yo no estaba fijo en una posición. Yo soy técnico electrónico, esa era mi especialidad dentro de la infantería de marina y tenía que recorrer, la reparación de los equipos y todo eso estaba a mi cargo. Y no he visto. Puede haber existido pero el tema está en que si uno lo saca de contexto…Veinte mil actuaron en un momento puntual durante el conflicto; había ocho mil combatientes en el campo, y una persona que haya cometido ese tipo de delito (que en ese momento no era delito porque si alguien cometía una falta y le correspondía calabozo, en lugar de calabozo se lo estaqueaba). Supongamos que en ocho mil hubo un estaqueo, no hay que tomarlo como la generalidad de los casos. En el caso de la infantería de marina no hemos tenido ninguna queja al respecto. Ahora hubo, por ejemplo el CECEM de Corrientes, una larga lista de soldados que denunciaron el estaqueo, concretamente, pero cuando tuvieron que ir a dar declaraciones…se rompió todo cuando un soldado dijo, en la indagatoria ante el juez, yo en realidad estoy diciendo lo que me enseñaron que diga. Entonces, a ver, no podemos decir que no existió. simplemente no era la generalidad como se lo quiere mostrar muchas veces. En cuanto al armamento; en muchos casos el armamento argentino era mucho más moderno que el que traían ellos. En las comunicaciones, que es lo mío, yo puedo dar fe porque era mi especialidad. Nosotros teníamos equipos de origen inglés mucho más modernos que los que traían ellos. Nosotros tuvimos la suerte de estar todavía vivos y escuchar el testimonio de los británicos. Y uno escucha testimonios del generalato y de los soldados británicos, y uno empieza a darse cuenta que todo este mito que se creó acá en Argentina no es tan así ¿No es cierto?

 

 

Sobre el Autor

Carlos Suarez
Periodista egresado del ISET N° 18 "20 de Junio" de Rosario, S.F. en 1990. Participó del Primer Congreso Internacional de la Comunicación y el Periodismo en 1998. Colaboró con el programa LA OREJA de Radio Rivadavia conducido por Quique Pesoa en 1992. A partir del 1 de octubre de 2018 condujo VIVA LA MAÑANA por Radio Viva 104.9 de Federación, E.R. En este 2019/2020 administra y redacta en esta página Federación al Día. A partir del 29 de junio de 2020 volvió a FM Stereo 99.3 con el clásico "Demasiado temprano para mentiras", desde las 7 de la mañana. En marzo de 2021 comenzó el nuevo ciclo "La Mañana de Uno" por la 106.1, de lunes a viernes y de 9 a 12 de la mañana.