FALLECIÓ CARLOS MARTENS.

Carlos Martens, responsable de la Facultad de Humanidades de la Universidad Autónoma de Entre Ríos (UADER), había sido atropellado por un motociclista el pasado miércoles cuando intentaba cruzar Avenida Eva Perón, frente de la Sede de la Facultad UADER en Federación. Personal médico diagnosticó que ambas personas, atropellado y motociclista, habían sufrido lesiones de consideración, trasladando a Martens, para una mayor atención, al Hospital Delicias Concepción Masvernat de la localidad de Concordia. Posteriormente, se supo que quedó internado en el sanatorio Garat con fractura de fémur, hombro, clavícula derecha y pelvis.

Allí permaneció en la Unidad de Terapia Intensiva, con múltiples fracturas de gravedad y además se le diagnosticó Covid positivo. Finalmente, este domingo 5 falleció.

La comunidad federaense expresó su respeto y fue el propio intendente de esa localidad, Ricardo Bravo, quien enfatizó “mis condolencias a familiares, amigos, compañeros de trabajo, y a toda la comunidad de UADER por la triste partida de Carlitos Martens. Noticia que me colma de tristeza, como a toda una comunidad que te despide. Recordaremos por siempre tu lucha incansable por la igualdad de oportunidades, por la universidad pública que tanto amaste hasta el último día. En mis recuerdos estarás siempre presente”.

JORNADA DE LUZ

La ex secretaria de Turismo de la ciudad, Graciela Racedo, viuda de Carlos Martens, invitó a realizar este martes 7 de septiembre, frente a la sede de la UADER, lo que llamó «una despedida de luz». La jornada se realizará frente a la sede de la universidad, avenida Eva Perón, en la cual cada uno que participe deberá portar una vela encendida que despedirá a Martens y honrará su memoria.

LO QUE DIJO EL SECRETARIO DE TURISMO

Al recordar al profesor fallecido el secretario de Turismo de Federación, Carlos Daniel Miller, dijo que, «la verdad es que a Carlos yo lo aprecio mucho». Miller aclaró que él prefería hablar como si Martens estuviera presente todavía. «Por muchos años fuimos compañeros en la Escuela Normal y, cuando se creó la figura del docente tutor, Carlos tomó esa tutoría y la verdad es que hizo un trabajo admirable, siendo el docente que dejaba el escritorio para ir hasta la casa del alumno e investigar por qué no estaba yendo a clases, por qué no estaba rindiendo en determinadas materias y articulaba alguna manera como para que el alumno cumpliera con los objetivos pedagógicos», dijo. «Eso demostraba su vocación y su compromiso con la educación; se notaba que le ponía mucho interés, mucho afecto», expresó Miller.