DESPUÉS DE OCHO AÑOS VOLVIÓ EL PERONISMO A LA MUNICIPALIDAD DE FEDERACIÓN.

Este domingo 9 de junio de 2019, más de doce mil personas votaron en la ciudad de Federación para intendente y otros cargos gubernamentales. De ese total más de seis mil votaron por el maestro mayor de obras Ricardo David Bravo, candidato del Frente Justicialista Creer Entre Ríos. Si bien la elección fue muy pareja y no apta para enfermos del corazón significó una derrota con todas las letras para el oficialismo de Cambiemos que ya lleva gobernando ocho años a la ciudad termal. Cambiemos sufrió una doble derrota ya que el pasado 14 de abril en las elecciones primarias conocidas como PASO Ricardo Bravo lograba cuatro mil cien votos y el candidato de Cambiemos, Rubén «Carozo» Rastelli, se llevaba seis mil trescientos y pico. Esta cifra, seis mil trescientos y pico, fue el resultado de la suma de los tres candidatos de Cambiemos en las PASO de abril y es significativo el modo en que se perdieron en favor de Bravo, o sea en favor del adversario político. También es más que significativo el aumento del piso de votos logrado por Bravo, de aquellas elecciones de abril el justicialista sumó a estas elecciones de este domingo casi dos mil doscientos votos más.
Este domingo 9 de junio de 2019, más de doce mil personas votaron en la ciudad de Federación para intendente y otros cargos gubernamentales. De ese total más de seis mil votaron por el maestro mayor de obras Ricardo David Bravo, candidato del Frente Justicialista Creer Entre Ríos. Después de ocho años de Cambiemos la ciudad necesitaba un cambio. Ya sea por el desgaste provocado por el hecho de gobernar una ciudad que es varias ciudades en una o por desaciertos y soberbias varias, Federación eligió darle una nueva oportunidad al peronismo. Porque no caben dudas que Ricardo Bravo es peronista y no parece pertenecer a ninguno de los «ismos» que el ideario de Juan Perón ha venido mostrando en estos últimos tiempos. Se le nota en lo multiclasista que es. Porque bastó ver la interminable caravana de gente, autos, camionetas y motos para observar a la clase baja, la media y algunos de clase alta que lo acompañaron en su andar nocturno por los barrios luego del triunfo.
¿Hasta qué punto incidió el desastre económico del gobierno nacional en la decisión tomada por la gente este domingo? ¿Qué resultado habría ocurrido si el gobernador Gustavo Bordet no lo hubiera acompañado? Son preguntas que casi ya no tienen sentido ante la realidad concreta: Bravo gobernará Federación por cuatro años y Gustavo Bordet será nuevamente el gobernador. Ambos deberán hacer realidad la remodelación, recategorización y mejoramiento del hospital San José, y éste no es más que un primer compromiso acordado para Federación. Vendrán otros compromisos, vendrán otros desafíos. La primera etapa ya está. Ahora Bravo deberá estar a la altura de las circunstancias y cumplir con las expectativas de las diferentes clases sociales que se expresaron este domingo en las urnas. Como dijo un dirigente sindical mientras sacaba la cabeza fuera de su vehículo en el medio de la caravana: «Ahora vamos a ver qué pasa».